FAATV

LA FEDERACIÓN ANDALUZA DE AUTOMOVILISMO, CANAL SUR Y RAFA BREIKO OS LLEVAMOS LOS REPORTAJES DEL CAMPEONATO ANDALUZ DE MONTAÑA Y DE RALLYES DE ASFALTO A TELEVISIÓN.
TODOS LOS DOMINGOS SIGUIENTES A LAS PRUEBAS A LAS 18.00H EN ANDALUCÍA TV

GALERÍA DE IMÁGENES

PÁGINAS VISTAS DESDE 9-10-2011

SUSCRÍBETE AL CANAL VIDEORALLYES

SUSCRÍBETE AL CANAL DE LA FAA

miércoles, 4 de enero de 2012

NUESTRO QUERIDO CARLOS SAINZ - EL MATADOR


He encontrado un genial artículo en Vavel.com  de Borja Fernández Gómez que creo que es digno de publicar tal cual porque no tiene desperdicio y, además de ser interesante, sirve de completa biografía de nuestro gran piloto recordando su trayectoria automovilística dentro y fuera de nuestras fronteras.
En este Dakar no lo tenemos desgraciadamente, pero seguro que pronto lo veremos compitiendo y emocionándonos al más alto nivel.


"En España mucha gente asocia la carrera automovilística de Carlos Sainz con su tan manida mala suerte, pero no debemos olvidar todo lo que ha hecho por el deporte del motor en nuestro país, abriendo el camino de muchos otros hacia la élite. En el mundo entero se le conoce como “el matador”, y es reconocido como uno de los mejores pilotos de la historia de los rallyes.
La vida de Carlos Sainz (Madrid, 1962) siempre estuvo ligada a la competición de élite. Sin ir más lejos, a los 16 años se proclamó Campeón de España de squash. A los 18, sus padres le regalan un Renault 5TS con el que poder ir a la Universidad a estudiar Derecho (que abandonaría un año después). Con ese coche, hace su debut oficial en rallyes, en el Shalymar de 1980. Ese rally lo ganó Jorge de Bragation con un Lancia Stratos, y el título de Campeón de España fue para el mítico Antonio Zanini (Porsche 911). Lucía el dorsal 78 y terminó en la 23ª posición. Pocos podían pensar que en ese rally había empezado la leyenda del primer, y hasta la fecha único campeón del mundo que ha dado este país.
Al año siguiente, en 1981, simultaneó las carreras en circuitos con los rallyes. Para disputar la Copa Iniciación de Circuitos utilizaría un Renault 5, mientras que para los rallyes adquirió un Seat Panda 45. A su derecha se sentaría uno de sus mejores amigos, Juanjo Lacalle. Su debut oficial se produce en el Criterium Luis de Baviera, donde terminan en una sorprendente segunda posición. A final de temporada, y tras ganar los siguientes tres rallys de manera consecutiva, se proclama campeón del Primer Campeonato Nacional de Seat Panda Rallye. Asimismo, termina en una más que meritoria segunda plaza en la Copa Renault Iniciación (montado en un R5TS) en circuitos como piloto oficial de la Red Renault de Madrid y Provincia. En 1982, consigue vencer en este campeonato con bastante suficiencia.
En 1983 vuelve a ganar en circuitos con el R5 y, para los rallyes, consigue un asiento oficial en el Seat Panda de Grupo 2 con el que gana el Campeonato Nacional de Seat Panda. Ese año, en el Rally Costa Brava, el célebre Antonio Zanini deja una frase, a modo de profecía, que pasaría a la posteridad: “hay un chaval que corre en un Panda que nos va a retirar a todos”. El nombre del chaval: Carlos Sainz. 
En 1984 vuelve a proclamarse campeón de la zona centro de pilotos con un R5. La falta de apoyos económicos para poder disputar más campeonatos en circuitos en Inglaterra, provoca que finalmente se decante por los rallyees. No se equivocaría. Opel, le ofrece ser piloto oficial con el Manta de Grupo B en el Rally Cataluña-Costa Daurada.
De cara a 1985 sus expectativas son muy altas. Montado en un Renault R5 Tour de Corse de Grupo B es piloto oficial de Renault España. Tras una gran temporada, en la que consigue imponerse en el Rally Vasco-Navarro, el Rally El Corte Inglés y el Rally Ciudad de Santa Cruz, termina el año en la segunda posición absoluta detrás del Lancia 037 de Salvador Serviá. Al año siguiente, se impone en nuestro querido Rallye Sierra Morena, de nuevo El Corte Inglés, y el Rallye Valeo, y vuelve a repetir subcampeonato tras Serviá.
Luis Moya y el Campeonato del Mundo
En 1987 cambia de montura. Ford requiere sus servicios para asaltar el nacional con el Ford Sierra RS Cosworth. Con Antonio Boto como copiloto, vencen el Rally Caja Alicante, el Villa de Llanes, El Corte Inglés, el Príncipe de Asturias, el Rally San Froilán y el Rallye Valeo, y se proclaman campeones de España de rallyes. Hasta la fecha, el mayor éxito de Sainz como piloto.
En el Rally de Portugal de ese mismo año, y luciendo el dorsal 11 en su Ford Sierra Cosworth RS, hace su primera aparición en el Mundial. No consigue terminar, pero comenzaba la carrera de un futuro Campeón del Mundo. 
Posteriormente, disputa el Rallye de Córcega, con una meritoria 7ª plaza, y la 8ª en el RAC de Gran Bretaña. Termina el año en la 35ª posición con 7 puntos, algo meritorio teniendo en cuenta que sólo disputó tres rallyes y lo hizo con un equipo privado.
De cara a 1988 se sienta a su derecha un nuevo compañero: un copiloto gallego de 28 años y de nombre Luis Moya. Moya, venía de ser campeón del Regional Gallego con José Mora, y de disputar el campeonato de España en un R5 con Guillermo Barreras dentro del equipo oficial en 1987. Así, la pareja Sainz-Moya se dispone a afrontar el reto de repetir el título de Sainz del año anterior. Para ello, cuentan nuevamente con un Ford Sierra Cosworth. Comienzan el año con la segunda plaza tras el francés Bruno Saby (piloto mundialista en aquella época) en Cataluña. Posteriormente, vencen el rallye Sierra Morena, el Rally Playa de Aro, el Caja Alicante, el Príncipe de Asturias y El Corte Inglés. Terminaban imponiéndose por delante de Josep Bassas (BMW M3), Beny Fernández (Opel Kadett GSI), Salvador Serviá (Lancia Delta) y Jesús Puras (Ford Sierra Cosworth RS privado). Era el segundo título nacional absoluto de Sainz.
En el mundial de ese año, participa en Portugal donde vuelve a abandonar, 5ª posición en Córcega, 6º en Finlandia, y se despide con un 7º puesto en el RAC. El mundial lo acaba con 26 puntos y una espectacular 11ª posición. Sus resultados le ponen en el escaparate mundialista.
Consolidación en el Mundial
Sus buenas actuaciones con un coche de propulsión trasera le abren definitivamente las puertas del Campeonato del Mundo. Y el que le da la oportunidad es Ove Andersson, el director deportivo del equipo Toyota, que le confía uno de los Toyota Celica GT-4, con el apoyo de Repsol como patrocinador. El calendario de esta temporada constaba de 13 pruebas, empezando en Suecia y finalizando en el RAC. Sainz participaría en siete de ellas. Las cosas no comenzaban bien para él, pues abandonaba en Montecarlo, Portugal, Córcega y Grecia. Así las cosas, Sainz y Moya llegan a Finlandia con muchas ganas, puesto que la temporada no estaba marchando como a ellos les gustaría. Consiguen canalizar toda esa energía y terminar terceros el Mil Lagos, consiguiendo así su primer podio mundialista. La temporada terminaría para ellos con otros dos podios más, un 3º en Sanremo (Italia) y un segundo puesto en el RAC. La temporada finalizaba con la victoria del italiano Miki Biasion (Lancia Delta Integrale), por delante de su compañero Alex Fiorio y del compañero de equipo de Sainz en Toyota, Juha Kankkunen.
Campeón del Mundo
1990 comenzaba con grandes esperanzas para Sainz y Moya, pues habían visto que podían ser muy competitivos con su Celica tras los podios de finales del año anterior. Eso sí, la empresa no iba a resultar nada fácil, puesto que había una ardua competencia. Lancia (Kankkunen, Auriol, Biasion y Fiorio), Toyota (con el propio Sainz, el sueco Armin Schwarz y Mikael Ericsson), Mazda (dos campeones del mundo como Hannu Mikkola y Timo Salonen), Mitsubishi (Ari Vatanen) o Subaru (con Markku Alen) eran algunos de los rivales más complicados. La temporada comenzaba con el segundo puesto en el Montecarlo y el abandono (tercero consecutivo) en Portugal. Le seguirían un 4º puesto en el Safari y un 2º en Córcega. En el griego Rally Acrópolis consigue la primera victoria en el mundial imponiéndose con autoridad por delante de los Lancia de Kankkunen y Biasion. Acababa de nacer la leyenda. Sainz conseguiría la victoria en Nueva Zelanda y un segundo puesto en Argentina. En ese momento, llega el Rallye Mil Lagos en Finlandia. Desde sus comienzos en 1951 sólo pilotos nórdicos conseguían la victoria en este rally. Hasta que llegó Sainz, que rompía ese récord (uno de los muchos) y se imponía por delante de Vatanen y Eriksson. La temporada terminaba con dos podios en Australia y Sanremo y la victoria final en el RAC con la que lograba su primer título mundial de rallyes. Lo hacía con 140 puntos, aventajando en 45 a Didier Auriol y en 55 a Kankkunen. En una sola temporada habían traído para España la primera victoria mundialista y el primer título de campeones. Carlos Sainz y Luis Moya habían hecho historia.
En 1991 se presentan como vigentes campeones del mundo en la salida de Montecarlo, donde consiguen la primera victoria del año. Por primera vez desde que está en el mundial consigue terminar el Rallye de Portugal, y lo hace con una incontestable victoria. También ganaría en Córcega, Nueva Zelanda y Argentina. Pero dos inoportunos abandonos en Australia y Cataluña en los dos últimos rallys de la temporada le relegan al subcampeonato del mundial, por detrás del Lancia Delta Integrale 16V del finlandés Juha Kankkunen, que conseguía su tercer mundial.
Segundo campeonato
Tras ser subcampeón el año anterior, Sainz se lanza a recuperar su cetro de campeón del mundo. Estamos, nuevamente, ante uno de los mejores planteles de equipos y pilotos de la historia del campeonato. Lancia contaba con Kankkunen, Auriol, Andrea Aghini, Philippe Bugalski y el argentino Jorge Recalde; Toyota con Sainz, Markku Alen y Armin Schwarz; Ford con Delecour y Biasion; Mitsubishi (Salonen y Eriksson), Nissan, con un joven Tommi Makkinen y el veterano Stig Blomqvist, y Subaru, con el prometedor Colin McRae y el campeón del mundo de 1981 Ari Vatanen. Sainz logra la victoria en el dificilísimo Rallye Safari, Nueva Zelanda, el Rallye de Cataluña, y el RAC, además de sumar cuatro podios más que le sirven para ganar su segundo campeonato del mundo por delante de Kankkunen y Didier Auriol.
Para 1993, Repsol y Toyota rompen su contrato de colaboración, lo que provoca la salida de Sainz de la marca japonesa. Sainz y la petrolera española recalan en el equipo Lancia Jolly Club, que no era oficial. Sentado en un Lancia Delta HF Integrale no cuenta con el material necesario para luchar por la victoria, y de hecho, su mejor resultado es un podio (2ª posición) en el Rallye Acrópolis. Ganó el mundial Kankkunen (Toyota) por delante de Delecour (Ford) y Auriol (Toyota).
En 1994 y 1995 forma equipo en Subaru, con un Impreza 555, con Colin McRae y David Richards como director de equipo. El primer año gana el Rally Acrópolis y termina el mundial segundo tras Didier Auriol. En el 95 gana Montecarlo, Portugal y España, McRae en Nueva Zelanda y el RAC, y el escocés termina imponiéndose en el campeonato por 5 puntos sobre Sainz. Los líos que se producen en aquella época entre ambos pilotos a cuenta de las órdenes de equipo hacen que Sainz decida marcharse a Toyota de cara a 1996. Pero una sanción al equipo japonés por una ilegalidad en el turbo de los Celica, les quita todos los puntos de 1995, y les penaliza con la no participación en el mundial los dos años siguientes. Para 1996 Sainz y Moya se encuentran sin equipo.
En ese momento fichan por Ford y se ponen a los mandos de un Escort RS Cosworth con quien ganan el Rally de Indonesia. Terminan terceros el año, tras Tommi Makkinen, que con su Mitsubishi Lancer  comienza una tiranía que se prolongaría durante cuatro años consecutivos, y McRae que fue segundo con su Impreza. En el 97 repiten en el Rallyee Acrópolis e Indonesia, y el podio de final de temporada es calcado al del año anterior.
Regreso a Toyota y RAC 98
En 1998 finaliza la prohibición de participar de Toyota, y Sainz ficha por los japoneses. En esta nueva andadura le acompaña Movistar. Comparte equipo con Didier Auriol, y pilotarán el nuevo Toyota Corolla WRC. El único objetivo es el campeonato del mundo, y romper el dominio del Lancer de Makkinen que llevaba dos campeonatos consecutivos. Sainz vence en el Montecarlo y en Nueva Zelanda y Makkinen se impone en cinco rallys, pero la regularidad de Sainz hace que lleguen al RAC con dos puntos a favor de Makkinen. El finlandés, abandono a mitad de rally tras sufrir su Lancer un fuerte golpe contra un bloque de hormigón que le destrozó una rueda y forzó su abandono. En ese momento, con llegar a la meta sumando tres puntos, Sainz era campeón del mundo. Pero la mala suerte se cebó con el madrileño. En el último tramo del rallye, a falta de 500 metros para el final, se rompe una biela de su Corolla y se ven obligados a retirarse. Es uno de los momentos más recordados de la historia de los rallyes, y en España pasaría a la historia por la mítica frase de Luis Moya:“¡Trata de arrancarlo por Dios, Carlos, trata de arrancarlo!”. Como curiosidad, hay que apuntar que pese a que hubiesen cruzado la meta, para poder terminar el rallye deberían haber completado el enlace, por lo que no hubiese bastado con empujar el coche hasta la meta.
En 1999 la temporada de Toyota es aciaga, y solo se salva por el 3er puesto de Auriol en el Campeonato del Mundo. Sainz finalizaba quinto y no conseguía ninguna victoria, pero si 8 podios, pero que acompañados por cuatro abandonos le imposibilitaron conseguir una mejor clasificación.
Ford Focus WRC
Tras el aciago año 1999, Sainz y Moya fichan por Ford, donde se reencuentran con Colin McRae y conducen el nuevo Ford Focus WRC. Sainz gana el Rallye de Chipre y termina 3º en el mundial tras el Peugeot WRC de Marcus Grönholm y el Subaru Impreza WRC de Richard Burns. Vista la superioridad de Peugeot en el asfalto, Ford se refuerza con el francés François Delecour para 2001 como especialista en dicha disciplina. Sainz no logra ninguna victoria y termina sexto en el mundial. McRae vence tres rallys y termina segundo tras el británico Richard Burns. En este año, la victoria en el Rallye de Córcega es para el cántabro Jesús Puras (Citroën Xsara WRC), que logra la segunda victoria de un piloto español en el mundial de rallyes. Este mismo año, Sainz recibe la Medalla al Mérito Deportivo y la Gran Cruz de la Real Orden del Mérito Deportivo. En 2002 logra vencer el Rally de Argentina, y termina 3º en un Mundial que vence Marcus Grönholm con su Peugeot 206 WRC, con el que gana cinco rallys. En esta temporada, se produce la primera victoria en el mundial, en el Rally de Alemania, del francés Sebastien Loeb. Luis Moya deja, a partir de este momento, de ser copiloto de Sainz y ficha como director deportivo con Subaru (y conseguiría el título del año siguiente con Solberg).
Fichaje por Citroën con Marc Martí
Para 2003 ficha por Citroën y comparte equipo con Colin McRae y Loeb. Su nuevo copiloto es el catalán Marc Martí. La victoria final en el mundial es para el noruego Petter Solberg (Subaru Impreza WRC) por un solo punto sobre Loeb. Sainz termina 3º y McrRae 7º. Carlos Sainz, logra vencer el Rally de Turquía.
En 2004 comienza la tiranía mundialista de Sebastien Loeb, con el primero de los, hasta la fecha, ocho títulos mundiales. Ese año Sainz logra su última victoria en el campeonato del mundo en el Rallye de Argentina y finaliza 4º la temporada. En 2005 corre tan solo dos rallys para Citroën sustituyendo al Belga François Duval y termina cuarto en Turquía y tercero en el Acrópolis. Sainz termina su participación en el mundial con un podio en el mismo rally donde logró su primera victoria 15 años antes.
En ese momento, se puso punto y final a una de las carreras más brillantes de la historia de los rallys. Sainz siempre se caracterizó por ser un hombre de récord. Consiguió 25 victorias en el mundial, tercero tras Marcus Grönholm (30) y Loeb (que sigue en activo y al finalizar la temporada de 2011 acumulaba 64). Además, es el piloto de la historia que más rallys ha disputado en el mundial (196), el segundo piloto con más podios (97), y el tercero con más tramos conseguidos (756). Además, se convirtió en 1990 en el primer piloto no nórdico en ganar el Rally Mil Lagos. Es el único piloto español en proclamarse campeón del mundo (1990 y 1992), y el primero en ganar un rally del mundial (en la actualidad el otro que lo ha conseguido es el cántabro Jesús Puras).
Rally Dakar
A mediados de 2005 anunció su fichaje por el equipo Volkswagen para disputar el mítico Rally Dakar. Ese mismo año queda 3º en la Baja Portugal. En el Dakar de 2006 logra ganar 4 etapas, pero termina 11º tras diversos problemas. Además, participa en el Rallye Shalymar de ese año de coche 0 copilotado por Juanjo Lacalle.
En 2007, vuelve a participar en el Dakar con el Volkswagen Touareg, gana cinco etapas, pero nuevos problemas mecánicos le mandan a la 9ª posición. Ese mismo año gana el Rallye Shalymar del Campeonato de España a bordo de un Skoda Fabia WRC.
En 2009 abandona por accidente el Dakar (en un barranco no señalizado en el libro de ruta) a falta de tres etapas cuando acumulaba una ventaja de 28 minutos. En 2010 por fin consigue su ansiado título en el Dakar, disputándose éste en tierras argentinas y chilenas. Ese año, también gana con el Touareg el Rallye Ruta de la Seda que se celebra en Rusia.
Candidato a la presidencia del Real Madrid
Reconocido madridista, en el año 2006, tras la dimisión de Fernando Martín, hay elecciones a la presidencia del Madrid, y Sainz acude a la elección dentro de la candidatura de Villar Mir. Finalmente, ganaría las elecciones Ramón Calderón.
Carlos Sainz Jr.
La gasolina corre por las venas de los que poseen el apellido Sainz, o al menos eso parece al ver los resultados que está teniendo el hijo del bicampeón español, Carlos Sainz Jr, en monoplazas. Su padre está siguiendo muy de cerca sus evoluciones, y es una de las más firmes promesas del automovilismo español.
Sainz, hoy
Sigue ligado al equipo Volkswagen, y en la actualidad es parte activa y muy importante en el desarrollo del VW Polo WRC que disputará el Campeonato del Mundo de Rallyes en la temporada 2013. Ha asegurado que no descarta una nueva participación, no muy lejana, en el Rallye Dakar.
Y así se puede resumir la carrera, hasta el día de hoy, de un piloto capaz de ganar en los terrenos más inexpugnables (Finlandia), recordado por su increíble regularidad y una capacidad innata para desarrollar, poner a punto y evolucionar coches. No obstante, para mucha de la prensa especializada, Sainz es uno de los mejores pilotos de la historia que, por diversas circunstancias, “sólo” pudo ganar dos Campeonatos del Mundo de Rallyes y un Rallye Dakar."


Artículo original de Borja Fernández Gómez. Vavel.com



No hay comentarios:

Publicar un comentario